A través de la utilización del neón, el video y fachadas de edificios para crear un doble sentido de sus obras y basada en referencias seleccionadas que llenan al espectador más allá de lo cotidiano, Olivia Steele ha ganado una reputación internacional por sus expresiones en espacios públicos, las cuales yuxtaponen algunas de las ambigüedades sociales más impactantes de hoy en la forma que se eligen, y el mensaje que transmiten. Olivia Steele es originaria de Nashville, Tennessee quien gracias al poder del gas de neón crea frases simbólicas que atraen y provocan a los espectadores. Su carrera expansiva la ha visto impartir fragmentos de sabiduría e ingenio en todo el mundo, desde Tulum hasta Berlín y Mumbai en forma de land art específicas e instalaciones en interiores. Además del estilo icónico y a menudo humorístico del trabajo de Steele, sus intervenciones se ubican deliberadamente en entornos que provocan reflexiones existenciales de ahí que sus obras sean simbólicas y algunas veces irreverentes, las cuales se suspenden en el tiempo y el movimiento, y por ello se ha posicionado como una de las artistas contemporáneas más atractivas que trabajan en su campo hoy en día.
Steele ha intentado alejarse de los límites tradicionales de la galería de arte para adentrarse en las calles, en los paisajes rurales y en la naturaleza, para así mostrar su afecto al público.
Por esta razón ha creado un proyecto de scripts iluminados e intervenciones de carteles titulados “PDA: exhibición pública de conciencia” el cual busca conectar espacios públicos en Europa, Estados Unidos y América del Sur, formando un huella de arte que debe ser buscada y seguida por todos.
Al cargar estas famosas fachadas con sus frases independientes, Olivia intenta desafiar las suposiciones de los espectadores sobre la cultura moderna y la semiótica convencional.
En el diálogo con los espacios públicos, sus declaraciones de neón más sentimentales se encuentran entre la sinceridad y el sarcasmo, a menudo dejando a su espectador cautivado por estas yuxtaposiciones. Al colocar declaraciones de neón con un significado, Steele inspira un sorprendente diálogo interno con el individuo y agrega una complejidad refrescante para el espectador a través de la ubicación y el entorno en el que se entregan. Con esto, Olivia busca que el neón vuelva a sus raíces, y se experimente desde las calles de la ciudad, pero que también se pueda encontrar en algún lugar inesperado y rodeado de naturaleza.
